Tetris de la Camioneta de Servicio
Cómo maximizar la eficiencia del servicio técnico organizando el vehículo de trabajo
Translated by Rachael Sine; see the original English version here.
El objetivo de reconfigurar cómo Manning Pool Service, en Houston, Texas, cargaba y organizaba sus camionetas de servicio técnico tenía tres propósitos: maximizar la eficiencia, la seguridad y la longevidad de los vehículos.
El proyecto, ahora llamado Planograma de Camionetas de Manning Pool Service, comenzó en la primavera de 2021, cuando los gerentes discutían cómo los llamativos vinilos de marca de las camionetas lucían excelentes por fuera, pero el interior de las cabinas y las cajas contaban una historia muy distinta.
“La estética lo es todo,” dice Alan Wiles, gerente de mantenimiento, servicio al cliente y ventas de la empresa, quien fue el encargado de desarrollar el programa. “Queríamos que la caja de la camioneta se viera tan bien como el exterior, y queríamos que fuera más fácil para los técnicos nuevos encontrar lo que necesitan.”
Con una formación en mecánica, pasión por las matemáticas y la química, y siete años de experiencia en la industria de las piscinas — además de una autoproclamada afición por el orden — Wiles se puso manos a la obra.
Midió cubetas y tapas. Estudió los tipos de cajas de camionetas en la flota. Llenar un rectángulo con objetos circulares requiere pensar fuera de lo convencional, así que Wiles evitó trabajar alrededor de los guardafangos y simplemente diseñó en función de un rectángulo, utilizando cubetas vacías como separadores para evitar deslizamientos.
Wiles tomó nota de qué herramientas usan primero los técnicos de servicio, cuáles utilizan con mayor frecuencia y dónde deberían colocarse dentro de la camioneta.
“Pensé en cómo hacer que el recorrido de un técnico nuevo al patio trasero del cliente fuera lo más eficiente possible,” dice. “El tiempo lo es todo. Cuantas más veces regreses a tu camioneta, más dinero estás gastando.”
Los artículos de uso más frecuente — como el kit para análisis químico, un balde designado con ácido y una taza medidora, o una red con cepillo — deben colocarse en el lado del conductor de la caja de la camioneta para reducir la cantidad de veces que el técnico tenga que rodear o ir y venir del vehículo, explica Wiles. Las tabletas de cloro de choque se colocan del lado del pasajero, ya que el técnico se acercará a ese lado después de realizar la prueba del agua.
“Puede parecer algo mínimo,” dice Wiles, “pero cada paso desperdiciado es energía desperdiciada.”
Además de pensar en cómo mantener separados el cloro de choque y el ácido por razones de seguridad (se decidió que la ceniza de soda es el mejor separador), también tuvo que considerar la distribución del peso y cómo la física de la carga impacta el mantenimiento de los camiones. Debido a que las piscinas en Houston requieren mucha sal para su mantenimiento, cada camioneta transporta alrededor de seis bolsas a la vez. Como la sal es el componente más pesado, el diseño de Wiles coloca esas 300 libras justo sobre el eje trasero.
La tierra de diatomeas se colocó hacia la parte trasera de la caja de la camioneta con separadores y equipo para facilitar el acceso.
Wiles creó un diagrama a escala — “Quiero ser lo más preciso posible,” afirma — con las herramientas, baldes, productos químicos y equipos de las camionetas de servicio, trabajando desde la parte delantera hacia la trasera de la caja, y codificó los elementos por colores según el tipo de químico.
El proceso con papel y lápiz le tomó unas seis horas, y luego presentó sus planes en la siguiente reunión de gestión.
Wiles cuenta que el programa fue aprobado de inmediato, aunque algunos técnicos se mostraron reacios al cambio. Después de un par de semanas, dice, los técnicos comenzaron a darse cuenta de que antes trabajaban más duro, no de manera más inteligente, y que tomó solo alrededor de un mes para que todos se adaptaran completamente.
Manning Pool Service implementó el nuevo sistema durante el verano y otoño del año pasado, y Wiles asegura que solo ha visto resultados positivos, incluyendo una reducción no prevista — pero beneficiosa — en los costos laborales debido a menos horas extra, lo cual, según la empresa, se debe al rediseño de la caja del camión.
Las camionetas también están en mejor estado. “Cada vez que llevamos nuestros vehículos al taller, el desgaste de las llantas es menor que antes,” dice Wiles, y agrega que ninguna de las camionetas “se hunde de forma extraña” ahora que la distribución del peso se aplica de manera constante en toda la flota de 30 unidades. Aunque no tiene un plan de negocios formal para su programa, Wiles está dispuesto a compartir su diseño. “Lo hermoso de esta industria es que todos contribuyen para el bien común,” comenta, “así que no me molestaría ayudar a mis colegas en cuanto a practicar una forma segura de almacenar y manejar químicos que pueden ser muy, muy peligrosos y riesgosos en la parte trasera de tu camioneta.”
