Translated by Rachael Sine; see the original English version here.

La detección de fugas en piscinas ha evolucionado mucho más allá de buscar goteos con colorante. Hoy en día, las mejores herramientas son instrumentos de precisión que ayudan a las personas profesionales a ahorrar tiempo, reducir la incertidumbre y aumentar los ingresos. Tres compañías — Leaktronics, Mini Bucket Test y Anderson Manufacturing Company — lideran el camino con productos y programas de capacitación que respaldan una detección precisa y eficiente.

Leaktronics

Equipos y capacitación de nivel profesional 

Leaktronics se especializa en equipos avanzados de detección de fugas diseñados para profesionales de piscinas, no para aficionados.

“Nuestros mejores productos son los básicos, los cuales fabricamos nosotros mismos y se llaman hidrófonos,” explica Darren Merlob, CEO y fundador. Estos funcionan como micrófonos submarinos, detectando la ubicación exacta de las fugas.

Otros equipos incluyen:

• Pipe Mics, que localizan fugas de plomería dentro de las tuberías
• Side Mics, ideales para áreas estructurales con fugas, como uniones de skimmers o nichos de luces
• The Pool Scope, que detecta fugas en el piso al desplazarse por la superficie de la piscina

Merlob afirma que el equipo está diseñado para minimizar las pruebas invasivas. Leaktronics enseña a sus usuarios certificados a realizar primero pruebas estáticas no invasivas, que normalmente permiten identificar una fuga en apenas 45 minutos.

La empresa ofrece un curso de capacitación de 11 horas para certificar a contratistas y proveedores de servicio técnico en sus métodos. Una vez certificados, las personas profesionales se incluyen en el mapa de “Find a Pro” de la compañía.

Desde su lanzamiento en 2011, Leaktronics se ha expandido más allá del mundo de las piscinas, atendiendo ahora también a la plomería, el riego y otras industrias. Merlob, quien comenzó en la limpieza y remodelación de piscinas, desarrolló el hidrófono insignia de Leaktronics y otros productos para cubrir una necesidad que vivió en carne propia.

Esa experiencia práctica también impulsa uno de los mayores diferenciadores de Leaktronics: su compromiso con el soporte al cliente.

“No hay nada que no hagamos por nuestros clientes,” afirma Merlob. “Pueden estar en un trabajo y hacemos una videollamada por FaceTime con ellos para obtener todos los detalles. Haremos lo que sea necesario.”

Mini Bucket Test

Una prueba simple y práctica de fugas

Jeff Johnson, presidente de Mini Bucket Test, describe a su empresa como el “caballo negro” de la industria de detección de fugas en piscinas.

El Mini Bucket Test simplifica la tradicional prueba del balde — un método usado desde hace décadas por personas profesionales de servicio técnico para determinar si una piscina pierde más agua de lo normal — mediante un dispositivo reutilizable y con peso de solo $20 dólares, que elimina la necesidad de múltiples materiales e instrucciones extensas.

“Es un detector de fugas para piscinas tipo hágalo usted mismo,” explica Johnson.

Para usarlo, se coloca el Mini Bucket Test en el primer escalón de la piscina y se llena hasta que el nivel de agua en el dispositivo coincida con el de la piscina. Después de 24 a 48 horas, se comparan los niveles: si el agua de la piscina ha bajado más que la del Mini Bucket Test, esto indica una posible fuga. Esta herramienta sencilla ayuda a descartar la evaporación y facilita el monitoreo de pérdida de agua sin necesidad de equipos complejos.

Lanzado poco antes de la pandemia de COVID-19, Mini Bucket Test enfrentó desafíos iniciales en el mercado. Hoy está presente en unas 1,300 tiendas a nivel nacional y disponible en plataformas en línea como Amazon y Walmart Marketplace. La empresa también ofrece un video tutorial en su sitio web.

Aunque el producto gana tracción, Johnson afirma que la educación del mercado sigue siendo clave.

“La mayoría no sabe que este producto existe,” comenta. “Todos saben que educar sobre un producto nuevo es un proceso largo y tedioso, pero estamos creciendo y recibiendo [excelentes comentarios] en todas las ferias de piscinas.”

Anderson Manufacturing Company

Apoyando a las personas profesionales con equipos comprobados

“No existe una herramienta única o ‘bala de plata’ para la detección de fugas que encuentre todas las filtraciones,” afirma Britta Flynn, gerente de marketing en Anderson Manufacturing Company. “De hecho, nos gusta decir que no puedes comprar un ‘detector de fugas,’ porque el verdadero detector eres tú: tu trabajo es llegar a una conclusión lógica basada en la información que recopilas en tus pruebas.”

Anderson equipa a las personas profesionales con una gama completa de equipos de diagnóstico para respaldar ese proceso. Uno de sus productos más destacados es el LeakTrac 2400 Vinyl Liner Leak Detector, introducido hace más de 30 años.

El LeakTrac 2400 ayuda a las personas profesionales de piscinas a localizar rápidamente incluso las fugas más pequeñas en revestimientos de vinilo — o en cualquier contenedor de agua con carcasa eléctricamente aislante, incluido el fibra de vidrio — enviando una pequeña carga eléctrica a través del agua de la piscina. Cuando la carga se escapa por un orificio en el revestimiento, el sistema la rastrea, identificando la fuga en minutos sin necesidad de una inspección visual. Ahora en su cuarta generación, el LeakTrac 2400 incorpora conectividad inalámbrica y controles digitales, lo que lo hace más rápido y fácil de usar.

Otros equipos incluyen:

• Dispositivos electrónicos de escucha e hidrófonos, que detectan el sonido burbujeante creado por el aire al escapar hacia un suelo saturado de agua.
• The Leakalyzer, un sensor rápido de pérdida de agua que mide cambios de nivel hasta la diezmilésima de pulgada y los grafica en tiempo real, ayudando a las personas profesionales a confirmar si una piscina tiene una fuga activa.

Anderson da prioridad a la confiabilidad sobre la novedad.

“Nos enfocamos en los productos comprobados que realmente necesitas, en lugar de productos llamativos que pueden funcionar en algunas circunstancias pero no son tan efectivos de manera generalizada,” explica Flynn. “Muchos de los productos que originalmente lanzamos al mercado han sido copiados por otros, pero no logran replicar la misma calidad e innovación.”

Según Flynn, el mayor desafío en la detección de fugas es la escasez de profesionales en el campo. “Prácticamente todas las empresas con las que hablamos sienten que no hay suficientes especialistas en detección de fugas en su área para cubrir la demanda,” afirma. “Anticipamos que más constructores y empresas de servicio técnico de piscinas comenzarán a ofrecer servicios de detección de fugas para mantener satisfechos a sus clientes y aumentar los ingresos por reparaciones.”